La Universidad Francisco de Vitoria (UFV) acogió el 23 de junio la graduación de los alumnos del Máster Universitario en Acción Política, Fortalecimiento Institucional y Participación Ciudadana en el Estado de Derecho codirigido por Ignacio Cosidó y Óscar Elía. Ambos dedicaron unas palabras a los alumnos junto al padrino de la promoción, Manuel Pizarro, economista, jurista y político español, quien pronunció un emotivo discurso sobre el papel de la política y las consecuencias del mal desempeño de la profesión.
Colaboración con el Atlántico Instituto de Gobierno
El acto de graduación del Máster Universitario en Acción Política, Fortalecimiento Institucional y Participación Ciudadana en el Estado de Derecho reconoció el esfuerzo de los alumnos que han dedicado un año a formarse en un programa que combina la tradición del humanismo político occidental con las herramientas profesionales necesarias que requiere la acción política contemporánea y con una gran comunidad de antiguos alumnos que ocupan algunos de los puestos y cargos políticas más relevantes en América Latina y España.
El programa diseñado por la UFV el colaboración con el Atlántico Instituto de Gobierno surge de la común vocación de formar líderes de servicio orientados a la promoción del bien común de la sociedad global, y se articula sobre las fortalezas de ambas instituciones. Al ser un programa internacional, fortalece así la red de políticos y gestores públicos que trabajan por la democracia liberal y la eficiencia de los servicios públicos en los países de habla hispana.
Manuel Pizarro, padrino de la promoción
El acto comenzó con Óscar Elía, codirector del máster junto a Ignacio Cosidó, que aseguró que “no corren buenos tiempos para la política”. Recordando las palabras de Ronald Reagan en las que el presidente estadounidense identificaba a la política como “la profesión más antigua del mundo”, el codirector fijó a la política como una actividad imprescindible. “Vivimos en tiempos que transcurren con el relativismo moral, el paganismo, etc. La política aparece como una actividad bajo sospecha y prescindible. Pero todos los que estamos aquí sabemos que la política es algo necesario”, sentenció Elía.
El codirector apeló a las enseñanzas que los alumnos han recibido a lo largo del máster, en el que los alumnos han aprendido que “la política implica tener una visión amplia, sin caer en el reduccionismo”. “Es necesario recuperar nociones básicas de la vida política. El orden. Una noción de política fuerte y ambiciosa, y sobre todo recuperar la idea de verdad”, observó Elía, para quien la importancia y la profundidad de la política “no está en los debates, sino en los conceptos”.
El siguiente en tomar la palabra fue el padrino de la promoción, Manuel Pizarro Moreno, quién aseguró sentirse “muy honrado de ser padrino de algo importante” además de serlo en una institución como la UFV, a la que Pizarro profesa “especial cariño”. El padrino alabó el papel y la labor de la universidad “en un mundo paganizado”. “El que olvida las raíces pierde su identidad”, aseguró Pizarro, quien ve en la UFV una institución que, desde el nombre, hace recordar a sus alumnos de dónde vienen.
El político en tiempos del presidente José María Aznar explicó a los asistentes diversas experiencias vitales para ayudarles a comprender el mundo actual. “Yo viví cuando llegamos con solo 12 millones de cotizantes y se repartía de donde no había. Quería hacer unas pequeñas reflexiones al respecto. Yo he sido político, y es una de las profesiones más importantes nobles en las que se pueden trabajar, porque es una profesión para los demás”, explicó Pizarro, quien habló a los alumnos, entre otras cosas, del por qué se generan las crisis económicas, o cómo identificar si el sistema de un país es democrático o no.
Pizarro finalizó asegurando que “sin políticos comprometidos es imposible labrar un futuro”. Por último, antes de la entrega de diplomas, el padre Justo Gómez, L.C., capellán de la UFV, dedicó unas palabras a los graduados. “Esta meta que habéis conseguido es una meta volante, pero una importante meta. Yo os insisto a vivir la política con esa actitud de servicio”, aseguró el capellán, ya que para él la política “exige vivir ese compromiso al servicio de los demás y no buscar la propia utilidad, sino el bien de todos. Al final esta es la enseñanza de Jesús”.