En opinión de Javier Gil Guerrero, profesor del Grado en Relaciones Internacionales de la Universidad Francisco de Vitoria, “la guerra híbrida es lo que ya aplicó Rusia en Ucrania en 2014, en el Donbás y en Crimea, cuando manda soldados disfrazados de civiles o de voluntarios locales, acompañados de una campaña de desinformación, donde se genera una especie de confusión”.
“Guerra híbrida es un término que se usa ahora como una corriente, y que genera mucha atracción, pero que en el fondo es usar todos los recursos del Estado en una guerra, no solo mandar tropas de forma abierta y directa, sino también afectar a la ciberseguridad con ataques, afectar a los medios de comunicación, generar tensión económica, desestabilizar las instituciones extranjeras por medio de ataques informáticos o por medio de campañas de desinformación y, por así decirlo, no llegar a mostrar sus cartas hasta el final mismo de la operación», explicó así Gil Guerrero.