Un estudio reciente, liderado por David Varillas, investigador de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UFV y cofundador de Sportnomics, ha destacado el papel esencial de la genética en la absorción y metabolismo del hierro, proponiendo una combinación de suplementación de hierro adaptada a predisposiciones genéticas específicas como una estrategia eficaz para optimizar el rendimiento en ciclistas de élite.
La deficiencia de hierro es común entre los atletas de resistencia debido a la alta demanda, pérdidas incrementadas y problemas de absorción, lo que puede afectar negativamente su rendimiento.
Aunque la suplementación de hierro puede prevenir la disminución de niveles sanguíneos cruciales, no hay consenso claro sobre su impacto en la mejora del rendimiento deportivo.
Influencia de la genética en el rendimiento
El estudio analizó el rendimiento de 28 ciclistas profesionales durante una temporada, encontró que aquellos con el genotipo GC del polimorfismo c.34C>T del gen responsable de la hemocromatosis (HFE) presentaban niveles más altos de hemoglobina y hematocrito durante la temporada. Estos parámetros son esenciales para el transporte de oxígeno, crucial en pruebas de resistencia.
“Estos parámetros mejorados son fundamentales para un buen desempeño aeróbico, permitiendo un mejor rendimiento en competiciones de larga duración”, explica Varillas.
Impacto del polimorfismo AMPD1 en la eficiencia energética
El polimorfismo c.34C>T de la adenosina monofosfato deaminasa1 (AMPD1) también mostró una influencia significativa. Los ciclistas con el genotipo CC demostraron una mejor adaptación y rendimiento en competiciones largas, gestionando mejor las reservas de hierro y energía.
“El gen AMPD1 es clave para el metabolismo energético en los músculos, y sus variaciones afectan notablemente el rendimiento deportivo”, comenta Varillas.
Suplementación de hierro personalizada y adaptada genéticamente
La investigación demostró que la suplementación de hierro en ciclistas con el genotipo GC del gen HFE mejoró sus resultados en competiciones relevantes. “Estos ciclistas participaron en Grandes Vueltas de tres semanas (Giro de Italia, Tour de Francia y Vuelta a España) y ganaron más carreras”, señala el investigador de la UFV.
La dosis utilizada fue de 105 mg de hierro diario junto con multivitamínicos para mejorar la absorción del hierro, en aquellos ciclistas que presentaron un valor de ferritina inferior a 35 ng/ml en la pretemporada como criterio de inclusión para este protocolo de suplementación.
Parámetros bioquímicos y rendimiento
Durante la temporada, se realizaron cuatro análisis de sangre para medir niveles de hemoglobina, hematocrito, hierro sérico, ferritina y transferrina. Estos parámetros se ajustaron regularmente para optimizar la salud y el rendimiento de los ciclistas.
“Monitorear los parámetros bioquímicos regularmente permite ajustar la suplementación de manera personalizada”, aclara Varillas.
Este estudio resalta la importancia de considerar la genética en la planificación nutricional y la suplementación para atletas de élite. Combinar la suplementación de hierro con una predisposición genética específica puede ser una estrategia eficaz para mejorar el rendimiento deportivo.
“La integración de la genética en la planificación de la nutrición y la suplementación deportiva abre nuevas vías para la investigación y la optimización del rendimiento en atletas de alto nivel”, concluye el experto.