Investigadores españoles revelan que la proteína PGLYRP1 bloquea la acción del sistema inmunitario contra el cáncer.
El cáncer de páncreas es una de las formas más letales de cáncer debido a su diagnóstico tardío y baja tasa de supervivencia.
Los factores que contribuyen al aumento de casos incluyen el envejecimiento de la población, el aumento de la obesidad, el consumo de tabaco, el consumo de alcohol, una dieta poco saludable y la inactividad física.
Resistencia a la quimioterapia y evasión del sistema inmunitario
El adenocarcinoma ductal pancreático (PDAC) es uno de los tumores sólidos más difíciles de tratar y con mayor mortalidad, con una tasa de supervivencia a cinco años de apenas el 11%.
“Esta baja supervivencia se debe a la resistencia a la quimioterapia y la capacidad de las células cancerosas para evadir el sistema inmunitario”, explica Víctor Sánchez-Arévalo, investigador principal del Grupo de Oncología Molecular de la Universidad Francisco de Vitoria.
Identificación de las células madre del cáncer
En un reciente estudio publicado en la revista Gut, de alto impacto, y dirigido desde el Instituto de Investigaciones Biomédicas Sols-Morreale (CSIC-UAM) y en el que han participado diferentes instituciones europeas como el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), la Universidad de Maguncia (Alemania) y la Universidad Francisco de Vitoria (UFV), se utilizó el modelo murino KPC y líneas celulares de tumores pancreáticos para identificar células madre del cáncer (CSCs).
Los investigadores descubrieron que las células marcadas por EpCAM, Sca-1 y CD133 mostraban un gran potencial como células madre, destacando su capacidad para formar esferoides y organoides.
El papel del TNFα en la regulación de PGLYRP1
Los resultados indicaron que la proteína PGLYRP1, regulada por el factor de necrosis tumoral alfa (TNFα), juega un papel crucial en la evasión inmunitaria.
“PGLYRP1 interfiere con el entorno microambiental tumoral, promoviendo la supresión inmunitaria y la muerte de células T activadas”, explica uno de los principales autores Juan Carlos López-Gil, antiguo alumno del doble grado de biotecnología y farmacia de la UFV e investigador del Grupo de Células Madre del Cáncer y Microambiente Fibroinflamatorio del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBM) Sols-Morreale CSIC-UAM.
Protección contra la fagocitosis y la citotoxicidad
Se observó que la sobreexpresión de PGLYRP1 en las CSCs las protege contra la fagocitosis mediada por macrófagos y la citotoxicidad mediada por células T.
“Esto dificulta la capacidad del sistema inmunitario para atacar y eliminar las células cancerosas”, señala Susana García-Silva, investigadora del Grupo de Microambiente y Metástasis en el Programa de Oncología Molecular del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).
Implicaciones terapéuticas
Los expertos confirmaron la relevancia de la proteína PGLYRP1 en modelos humanos, donde su sobreexpresión también se observó en muestras de pacientes con PDAC.
“PGLYRP1 podría utilizarse como biomarcador para predecir la enfermedad y clasificar a los pacientes en etapas tempranas, así como para desarrollar nuevos tratamientos”, comenta Bruno Sainz Jr.,coordinador del proyecto y líder del Grupo de Células Madre del Cáncer y Microambiente Fibroinflamatorio en el Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBM) Sols-Morreale CSIC-UAM.
Nuevas estrategias de tratamiento
Los inhibidores de PGLYRP1, combinados con otros tratamientos aprobados o inhibidores de puntos de control inmunitarios, podrían mejorar significativamente la respuesta terapéutica en pacientes con cáncer de páncreas.
“Futuras investigaciones deberán centrarse en desarrollar inhibidores efectivos de PGLYRP1 y validar su eficacia en ensayos clínicos”, declara el estudio.
Estas estrategias podrían transformar el tratamiento del cáncer de páncreas, ofreciendo esperanza a miles de pacientes afectados por esta devastadora enfermedad. Los hallazgos del estudio abren nuevas puertas en la lucha contra el cáncer de páncreas.
“PGLYRP1 emerge como un marcador esencial en la biología de las células madre del cáncer pancreático, proporcionando una nueva diana para intervenciones terapéuticas”, concluye el estudio.